- Purificación Tortuero regula a su antojo los plenos municipales, permitiendo, por un lado, a sus ‘aliados políticos’ plantear preguntas que no lo son y obstruyendo, por otro, la labor de la oposición y las opiniones de los vecinos que se muestran discrepantes con su gestión.
Jueves, 13 de noviembre de 2014.- El Partido Popular de Alovera ha pedido a la alcaldesa de la localidad, Purificación Tortuero, más rigor a la hora de ‘conducir’ las sesiones plenarias que se celebran en el Ayuntamiento, “ya que en demasiadas ocasiones parece olvidar que es el máximo órgano de representación de los ciudadanos”. Esta reclamación viene alentada por la postura que mantuvo la regidora municipal durante el Pleno ordinario de octubre –que se celebró el día 10 de noviembre–, “consintiendo cualquier cosa a sus ‘aliados políticos’ y, a la vez, obstruyendo la labor de la oposición y coartando las opiniones de los vecinos que se muestran discrepantes con su gestión”.
Según relatan desde el PP, durante la sesión del lunes Tortuero permitió a la concejal del PSOE Teresa Méndez convertir su intervención en el turno de Ruegos y Preguntas en un “discurso autoexculpatorio para intentar justificar su reprobable actitud en un caso al que la Justicia ha dado ‘carpetazo’ y ha puesto en evidencia las malas artes que suelen exhibir con gran asiduidad los ediles socialistas”. “La alcaldesa autorizó la intervención de Méndez a sabiendas de que lo que iba a plantear no era ni un ruego ni una pregunta, saltándose a la torera las reglas básicas que han de regir un Pleno y desoyendo las voces críticas de los concejales de la oposición. Algo a lo que, lamentablemente, nos estamos acostumbrando debido a la frecuencia con la que el PP sufre el menosprecio y desdén de la alcaldesa”.
Desaires que también padecen algunos vecinos que acuden a los plenos para plantear sus inquietudes y demandas; como el que el día 10 de noviembre reconvino la manera en la que se han llevado a cabo las obras en varias aceras de la localidad, que no cumplen las condiciones básicas de accesibilidad. “Desprovista de las armas de la razón, la alcaldesa se inclina por la táctica de la interrupción, cortando a su interlocutor a cada palabra hasta que agota su paciencia y le obliga a callar. Porque, cuando a Purificación Tortuero no le gusta lo que sus vecinos le dicen, ni escucha, ni atiende”.